Los problemas del aparato digestivo de nuestros animales de compañía son de las situaciones más frecuentes en las clínicas veterinarias; los vómitos, las diarreas, la inapetencia, son casuísticas de las que difícilmente un ser vivo puede escapar a lo largo de su vida, por lo que es muy conveniente conocer su origen y sus especiales características.
Curiosamente estas problemáticas tienen un repunte de presentación en las fiestas familiares (Navidad, Fin de año…), eventos en los que, desgraciadamente, los animales de compañía reciben, en forma de cariño mal entendido, un exceso de alimentos inadecuados por parte de los familiares y amigos que acuden al hogar para celebrar los festejos. Pero no solo los inadecuados manejos alimentarios de los presuntos racionales son la causa de estas patologías, ante tal numero de posibilidades existentes, intentaremos ceñirnos a los más habituales y de frecuente presentación.
Y algo a tener muy en cuenta en el conocimiento y manejo de este tipo de patologías: los problemas gastrointestinales no solo tienen su solución en fármacos de diversas presentaciones y acciones, en las patologías gastrointestinales la elección y el adecuado uso de dietas específicas, es uno de los pilares fundamentales para la curación de los problemas gástricos e intestinales; la combinación adecuada de nutrientes y su posterior consumo por el animal afectado es una de las vías más importantes de solución de estos tipos de enfermedades.
TRASTORNOS DEL INTESTINO DELGADO.
Este tipo de alteraciones son también de amplia presentación en las clínicas veterinarias, debidos entre otras razones a intoxicaciones, inadecuados alimentos, excesos alimentarios, cuerpos extraños, agentes infecciosos, víricos, parasitarios…
Los trastornos del intestino delgado suelen presentarse con diarrea; la diarrea podría definirse como el cambio de la frecuencia, consistencia, e incluso volumen, de las heces.
Tanto para los profesionales como para los propietarios de animales de compañía, es muy útil tener presente el siguiente esquema para saber si el origen de las diarreas que presenta el animal se deben a un problema del intestino delgado o del intestino grueso:
CARACTERÍSTICAS | INTESTINO DELGADO | INTESTINO GRUESO |
Consistencia fecal | Líquida o “pastosa” | Pastosa o “semi formada” |
Volumen fecal | Elevada cantidad | Pequeña cantidad |
Frecuencia | Normal o ligeramente incrementada | Incrementada |
Malestar | Puede existir | Raro |
Moco en heces | Generalmente ausente | Generalmente presente |
Vómitos | Pueden aparecer | Infrecuente |
Pérdida de peso | Puede existir | Raro |
Teniendo presente el anterior cuadro, es momento de conocer los tipos de diarrea que pueden producirse en este importante tramo del aparato digestivo:
- DIARREA OSMÓTICA O DE MALABSORCIÓN.
Estamos ante el tipo de diarrea más habitual en animales de compañía; esta diarrea se produce por la presencia en la luz intestinal de nutrientes que no se han absorbido… estos nutrientes provocan la entrada de agua (difusión pasiva) al interior del intestino y por tanto la emisión de heces líquidas o de escasa consistencia. Las causas más habituales son malas digestiones, problemas en la absorción, excesos alimentarios… Estos casos suelen resolverse con el ayuno de alimento sólido anteriormente comentado.
- DIARREA SECUNDARIA A LA ALTERACIÓN DE LA PERMEABILIDAD DE LA MUCOSA.
El intestino delgado posee una barrera de permeabilidad, una barrera formada por diversas uniones de diversos tipos de tejidos, vasos linfáticos, capilares sanguíneos y el sistema inmunitario; cuando existe algún tipo de problema que altera estas estructuras se produce diarrea que puede verse acompañada de sangre; en estos casos la dieta de 24 horas no suele ser suficiente.
- DIARREA POR ALTERACIÓN DE LA MOTILIDAD GASTROINTESTINAL.
La motilidad es el imprescindible movimiento que realiza el aparato digestivo para que los alimentos (nutrientes) transiten por el recorrido; la alteración más habitual de la motilidad es por una reducción de las contracciones, situación que provoca el tránsito rápido del contenido y su salida al exterior con las características propias de la diarrea.
En este tipo de diarrea no existe una respuesta fija a la dieta de 24 horas.